Saint-Pierre

Contágiese de la alegría de vivir de Martinica, una isla de origen volcánico, legado galo y corazón criollo. Explore las antiguas plantaciones de caña de azúcar, las excepcionales destilerías de ron, los cultivos de cacao y las ruinas de Saint-Pierre a los pies del monte Pelée, un volcán que sigue activo. Si le gusta la naturaleza, puede hacer una excursión a la cascada de Saut du Gendarme, explorar la península de la Caravelle, que tiene más de 10 millones de años, o pasear por la playa de arena oscura del norte. No se pierda el pueblo de Le Carbet, famoso gracias al artista Gauguin. Y, mientras se relaja con el dulce licor nacional, entenderá por qué la mezcla de cultura criolla y francesa hace de Martinica un lugar tan mágico.